TRABAJADORES DE LA EDUCACIÓN SE ARTICULAN EN TODO CHILE PARA POSTERGAR LA IMPLEMENTACIÓN DE LOS SLEP

La implementación de la «Ley de nueva educación pública”, que tiene como objetivo numérico traspasar los 5.195 colegios administrados por municipios a 70 Servicios Locales de Educación Pública (SLEP) se encuentra en jaque. En todo el territorio nacional docentes, asistentes de la educación y trabajadores de los Departamentos de Administración de Educación Municipal se han articulando para superar esta nueva forma de gestión que profundiza la lógica de entender la educación como una mercancía. Bajo ese contexto, el pasado 19 de agosto, en la ciudad de Calama, más de mil trabajadores y trabajadoras marcharon en rechazo a la instalación del SLEP Licancabur.

El SLEP Licancabur tiene como fecha de implementación el mes de marzo 2022 y comprendería las comunas de Ollagüe, María Elena, Tocopilla y Calama. Para el presidente del Magisterio de esta última comuna, Ariel Aguirre, ésta no es la desmunicipalización que como docentes aspiraban: «Como Magisterio una de nuestras demandas históricas fue la desmunicipalización de la educación, sin embargo esta nueva institucionalidad no arregla ninguno de los problemas que actualmente tiene la educación en Chile.  Bajo este modelo, se sigue sustentando la figura de el sostenedor, el financiamiento no es basal y  la participación de las comunidades educativas, en la discusión y resoluciones de la política educativa, es bastante reducida. Y eso no es todo, hay una cuestión laboral importante, puesto que un grupo no menor de trabajadores de las unidades centrales tanto de los Departamentos de Administración de Educación Municipal como de las Corporaciones perderán su fuente laboral».

Recordemos que antes de que se instalarán los 11 SLEP que actualmente están en funciones en el territorio nacional, 1.870 trabajadores ejercían sus labores bajo la gestión municipal, y que con la llegada de este modelo de gestión se dejaron fuera a 1.723, es decir, solo el 8% tuvo continuidad laboral: en el futuro este panorama puede ser aún más desolador, pues para el 2025 está previsto instalar otros 70 SLEP. Frente a esto el presidente nacional del Magisterio, Carlos Díaz Marchant, señaló: «No podemos esperar de brazos cruzados ¿Cuántas trabajadoras y trabajadores quedarán fuera del sistema?, simplemente no podemos aceptar esta lógica. No olvidemos que el propio Presidente de la República dijo en una entrevista que la educación era un bien de consumo, entonces cuando usted tiene esa visión por supuesto que es la lógica del mercado la que impera y que en esa perspectiva, no se entiende a la educación como un derecho humano fundamental y menos los derechos laborales de quienes día a día luchan por una nueva educación para un Chile más justo».

MOVILIZATE ESTE JUEVES 26: ¡A SUSPENDER LOS SERVICIOS LOCALES DE EDUCACIÓN! ESTA NO ES NUESTRA DESMUNICIPALIZACIÓN.