El pedagogo J. Dewey afirmaba que la escuela es una sociedad en miniatura y que, por tanto, la construcción de una sociedad democrática implica la existencia de una escuela democrática. En este sentido, es imperioso avanzar en democratizar nuestras instituciones escolares y las entidades que las dirigen, disminuyendo su conformación clientelar para fortalecer un sistema con capacidades profesionales especializadas que se centren efectivamente en lo pedagógico. Vemos los siguientes puntos importantes de resolver.

a. Consejo de Profesores, deben poseer un carácter resolutivo en todas las materias técnico-pedagógicas.

b. Consejos Escolares, deben poseer un carácter resolutivo en todas las escuelas del país.

c. Concursabilidad de todos los cargos directivos, reconociendo la trayectoria de los docentes de la misma comuna a la cual se postula. Modificar el concepto de Directivos Docentes con perfil gerencial, por perfiles de liderazgo pedagógico, con capacidad de trabajo en equipo y eliminando los modelos de gestión autoritarios y verticales.

d. En el caso de los cargos de dirección y equipos técnicos de Corporaciones educacionales, DAEM-DEM o Servicios Locales, se debe considerar prioritariamente su formación en las Ciencias de la Educación y su relación con la trayectoria y la formación continua en lo pedagógico, más allá del aporte adicional que pueda significar la formación o experiencia en el ámbito de la gestión u otras áreas de conocimiento.

e. Revisión del Sistema de Alta Dirección Pública.

f. Promover el sentido de comunidad docente y reconocer y estimular en la carrera docente la capacidad de trabajo en equipo y colaborativo.