Juan Soto, tesorero nacional del Colegio de Profesores: “Miles de personas ven como sus vidas cambian y su principal y única fuente de ingresos muere frente a sus ojos.”

Chiloé, 4 de mayo 2016.- Frente al drama humano que estamos sufriendo en toda la Provincia de Chiloé, donde decenas de miles de personas se están viendo afectadas por la naturaleza y principalmente por la irresponsabilidad de sectores privados que durante años han arrasado con la biodiversidad marina, como chilote, profesor y tesorero nacional del Magisterio, debo manifestar que es necesario, oportuno y justo, respaldar a los pescadores artesanales de la Isla Grande y conminar enérgicamente a las autoridades hacerse cargo de forma inmediata de este drama humano, económico y cultural que sufren los habitantes del archipiélago.

Junto con entregar nuestro apoyo institucional por esta difícil situación propiciada por las granjerías que los sucesivos Gobiernos, por medio del Estado Chileno, han dado a la industria de la salmonicultura, es necesario poner de manifiesto que las exigencias de los pescadores artesanales de Chiloé, no solamente son atingentes al escenario actual, sino también son un mecanismo para impedir un drama humano aún mayor y un estadillo social causado por las precarias condiciones de vida que azotan a mis coterráneos.

Resulta simplista y una salida facilista manifestar que lo ocurrido se debe única y exclusivamente al cambio climático y especialmente a la marea roja. Es de público conocimiento el abuso que la industria salmonera está cometiendo con el eco sistema, provocando un daño generalizado que afecta, hoy en día, a miles de personas que ven como sus vidas cambian y su principal y única fuente de ingresos muere frente a sus ojos.

Hoy es el momento en que las autoridades nacionales, regionales, provinciales y comunales deben hacerse cargo de este asunto y asuman la responsabilidad que les corresponde acceder a las exigencias de los pescadores movilizados de Chiloé.

También quiero manifestar mi más enérgico rechazo ante la represión que las Fuerzas Especiales de Carabineros, están ejerciendo contra los pescadores movilizados y sus familias.

Es de justicia que el Estado de Chile y las actuales autoridades deben dar una pronta solución a este drama social provocado por el abuso de años, y que hoy tiene a la Isla Grande de Chiloé en los ojos de todos los chilenos.

Nuestra querida Isla Grande de Chiloé y su patrimonio de la humanidad, no solo es mitos, música y curanto. Nuestra tierra debe dejar de ser el patio trasero de Chile. Por este motivo los chilotes lamentamos las actuales circunstancias que estamos sufriendo y sepan todos que con el mismo espíritu de superación con el que se levantan los trabajadores del mar durante las primeras horas de la madrugada, los chilotes nos erigimos para exigir que tanto la empresa privada como el Estado de Chile se hagan cargo para solucionar este drama humano, social y cultural que sufrimos. Porque Chiloé se lo merece, los chilotes lo exigimos.

 

Un saludo fraterno y solidario

 

Juan Soto Soto,

Tesorero Nacional

COLEGIO DE PROFESORES DE CHILE A.G.