Entrevista al nuevo Premio Nacional de Educación 2015.

El Premio Nacional de Educación 2015 conversó con el programa radial “Sala de Profesores” sobre su trayectoria, los años de la dictadura y sobre la actual reforma educacional. “Tengo 83 años, 60 dedicados a la educación pública”, dice para graficar su experticia en los temas de políticas educativas que le valieron el reconocimiento, un galardón que espera le “sirva para acumular más fuerza para hacer lo que hago, que es investigación histórica en educación”. El profesor de historia forma parte como jubilado, del Colegio de Profesores de Chile, y dice que se mantiene por “una tradición de sindicalismo docente de la cual no voy a renegar”

¿Cuándo se tituló como profesor?

Egresé del Instituto Pedagógico en 1955, y al mismo tiempo comencé a trabajar como ayudante de investigaciones en la superintendencia de Educación Pública, donde había un área técnica, así que tengo la experiencia de aula y de estar cerca de donde se cocinan las políticas públicas en educación.

Participó como Superintendente durante el gobierno de Allende. ¿Cómo fue esa experiencia?

Fui Superintendente y como es sabido, y recordado con alguna saña por algunos articulistas, participé en forma central en la elaboración del proyecto de reforma educacional cualitativa del gobierno del Presidente Allende.

¿Por qué dice que lo han recordado con saña?

Ha habido algunos torpedos que se me han lanzado en alguna editorial del duopolio, o por parte de algunos opinólogos de por ahí por esa participación.

¿Que labores desempeñó durante los años de la dictadura cívico-Militar?

Me integré en 1980 al equipo de investigación del Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, que junto con el CIDE y la Flacso, eran los únicos organismos que podían opinar sobre educación al margen de los organismos gubernamentales de la época. Nosotros presenciábamos atónitos, y en cierto modo impotentes, el tsunami que azotó a la educación chilena en general, en circunstancia que no había posibilidad de discutir u oponerse públicamente a esa revolución restauradora de fondo, que trastornó el equilibrio que siempre se recuerda nuestro régimen mixto entre educación estatal y privada, en diferentes fórmulas. Pero lo que ocurrió en 1980 fue un desequilibrio absoluto del que aún no nos recuperamos. Cuando recuerdo no dejo de asombrarme de los excesos que se levaron a cabo, y me sorprende que ahora se tilde de extremista a una reforma que es mucho menos desequilibrantes que aquella de 1980.

¿Cómo ve el intento que se está realizando por realizar reformas profundas al sistema?

Independiente de mi opinión, que es una de muchas voces de las que se escuchan, trato de evaluar a partir de mi inmersión en el repaso de la historia. En lo grueso creo que es una reforma indispensable de emprender correlativa con la conciencia mayoritaria de que se tiene que abordar seriamente la falta de cohesión social y la desigualdad en Chile. Esto requiere una educación muy distinta a la que heredamos. En ese sentido, este conjunto de reformas si bien no es la resolución definitiva y total, representa un avance que no se había dado antes y que hay que apoyar. Otra cosa son las posiciones específicas sobre los múltiples aspectos que involucra.

¿Cómo evalúa entonces la discusión sobre Carrera Docente?

Sobre Carrera Docente, quisiera recordar que en todos los esfuerzos que se realizaron tanto en este periodo, pero principalmente durante nuestra democracia republicana de antes del 73, siempre los proyectos eran decretos con fuerza de ley, excepto el estatuto docente de 1991. Por lo tanto, nunca hubo, como hoy, una discusión parlamentaria del tema con más o menos grado de participación de los actores sociales involucrados, y eso es algo que hay que valorizar. Lo segundo es que todos los esfuerzos anteriores a 1991, mantenía la tradición de que los profesores avanzaban casi exclusivamente por el reconocimiento a su antigüedad, y se reconocía casi simbólicamente los méritos, excepto abandonando el aula.

Departamento de Comunicaciones

COLEGIO DE PROFESORES DE CHILE A.G.